sábado, 28 de abril de 2007

The Watchmen


El planeta más rico del Universo, Planeta de Agostini, acaba de sacar, aprovechando el Saló del cómic de Barcelona, una edición de lujo del cómic de Alan Moore y Dave Gibbons “The Watchmen”. Ayer le estuve echando un ojo. Y eso es lo peor del mismo, que sale por uno ojo de la cara.
Y es que es oir la palabra mágica “Hollywood” para que su valor se dispare. Ya sabéis que Zach Snyder, el director de “300” está trabajando en ella. De hecho, en el trailer de la película de los espartanos, había un par de fotogramas donde aparecía Rorscharch ,uno de los protagonistas del cómic. Supongo que será una buena adaptación. La de 300 era ejemplar. Parece que Snyder sabe lo que se hace. También supongo que Moore volverá a lanzar sapos y culebras sobre la adaptación, pero ya estamos acostumbrados a su actitud de diva: coge la pasta y luego lanza demonios. Que conste que, si leéis el post sobre este autor en este mismo blog, veréis que muchas veces no se le puede criticar, pero en casos como “V de Vendetta”…en fin.
La nueva edición está muy cuidada, buen papel, buen tamaño, buen color y definición y un montón de extras. Con respeto a los extras, hay muchos textos de Moore, lo que no sé hasta que punto es bueno. Sus notas suelen ser muy densas y paranoicas. Para muestra, dos botones: las casi 50 páginas de obsesivas notas de “From Hell” o el relato del final del primer tomo de “The League of the Extraordinary Gentleman”.De esta última obra, en este mismo salón, ha salido el segundo (y por ahora, último) tomo excelente, aunque infinitamente inferior que el maravilloso primer tomo. En este caso se confirma eso de que segundas partes…aunque ya le gustaría a muchas segundas partes tener el nivel de esta, a pesar de ser mucho peor que la primera, reitero.
Supongo que ya sabréis de qué va “The Watchmen”: superhéroes en crisis, como en “Los Increíbles”. Me hace gracia el hecho de que los tíos más poderosos entren en crisis, tengan ideas políticas radicales ose depriman. Si lo relacionas con las fundamentadas teorías sobre la importancia del judaísmo en el panteón superheroico americano, se obtienen conclusiones bastante interesantes. En este sentido, recomiendo dos libros de entrevistas: ”Talk Shop”, donde el Maestro Will Eisner hablaba con las vacas sagradas del cómic made in USA y el libro “Eisner/Miller”, donde Eisner y Frank Miller diseccionan inmisericordes el mundillo y sus propias obras (es curioso ver como habla Miller de Sin City o 300). También recomiendo la ilustradora novela “Las extraordinarias aventuras de Kavalier y Clay” de Michael Chambon (argumentista de Spider Man 2 y 3 y Superman Returns).
En definitiva, cuando me sobren 35 Euros, casi 6.000 de las antiguas pesetas…¡jo!, me lo compraré. Creo que no puede faltar en mi comicteca. Con el tiempo también me compraré “V de Vendetta”, a pesar de que el dibujo de ese cómic me gusta bastante poco (única razón de porqué no lo tengo ya) y la segunda parte de los “Caballeros Extraordinarios”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cuando leí por primera vez The Watchmen debía tener unos ocho años. Cuando pude releerlo, me dí cuenta que recordaba viñeta por viñeta cada una de sus páginas. Los héroes encapuchados (ojo, a pesar de "llevar los calzoncillos por fuera", los personajes de Alan Moore, con la notable excepción del Dr. Manhattan, no tienen extraordinarios super poderes, no dejan de ser personas normales, tal vez con un buen entrenamiento físico y acceso a la más alta tecnología) habían dejado una impronta en mí más profunda de lo que creía. Al leer el comentario de la realización de una película, surgen en mí inquietantes dudas: ¿sobrevivirá el guión original a la cruzada de lo políticamente correcto? y... ¿serán capaces de representar a los aventureros disfrazados sin que a día de hoy sus vestimentas se vean ridículas? (léase la imagen ochentera de Night Owl o de Silk Phantom). No sé, no sé...