domingo, 23 de octubre de 2011

Mis disculpas: Tres películas para resarcirnos:

Ante todo, debo de pedir perdón a mis seguidores por la cantidad de tiempo que ha pasado desde que he actualizado por última vez este blog. Ha sido debido a circunstancias ajenas a mi voluntad, como os podéis imaginar, lo que no quita que os deba una compensación. Por eso, hoy publico varias ¿criticas? a películas, un poco más cortas de lo habitual, pero creo que tan serias y estrictas como de costumbre, si bien, más livianas.
Disfrutad.

Colombiana

Sinceramente, creo que tenemos suerte de tener en Europa un tipo como Luc Besson. Alguien polivalente (escritor, productor y director), inquieto al que las críticas le resbalan un poco y sigue a su bola, produciendo productos de diverso pelaje, calidad y prestigio. Como muestra, un botón. Besson está detrás de “Los tres entierros de Melquiades Estrada” o “Frontièr(s)”, películas de reconocido prestigio, cada una en su género. Aunque hay que reconocer que es más conocido por producir películas de acción de Serie B, como las sagas de Taxi o Transporter. Centrándonos en esta segunda clase de producciones, y dejando ex profeso fuera las películas por él dirigidas como “León, el profesional” o ”Juana de Arco”, podemos afirmar que ninguna de ellas son películas excelentes, si bien son todas muy divertidas y no toman el pelo al espectador ni venden humo. Son películas sencillas, que no simples, al servicio de el/la actioner de turno, sea Jason Statham, Sami Narci, John Travolta o, incluso, Liam Neeson.
En este caso, Besson y su coescritor habitual, el americano Robert Mark Kamen, nos presentan una nueva visita al mundo de las asesinas profesionales después de la ya mítica “La Femme Nikita(1990)”, película de la que ha surgido un remake americano bastante malo y hasta dos series, cada una más guilty pleassure que la anterior. En esta ocasión, la asesina es Cataleya Restrepo, una joven Colombiana interpretadas por la dominicana Zoe Saldaña (Sí, se escribe así, no Saldana o Saldanha, como he visto en muchos lugares). Su misión en la vida es la de vengarse de todos los que mataron a sus padres cuando era niña allí en Bogotá, mientras lleva una vida delictiva auspiciada y protegida por su tío Emilio (Un gordísimo Cliff Curtis). Pero resulta que sus principales objetivos están demasiado protegidas por la CIA, con lo que su misión no es tan fácil como pudiera parecer en un primer momento.
La película es entretenida y guarda momentos muy poderosos, si bien exige en varios momentos una gran suspensión de la credulidad. Especialmente una curiosa lección que el tío Emilio le da a una Cataleya niña en plena calle… No sé hasta qué punto, en este tipo de películas, esto se puede considerar un fallo. Entra dentro de la tradición de aquellas películas cuyo protagonista no es sobrehumano, pero es tan bueno en su trabajo que abruma. El género Heists, como las de Danny Ocean o el de actioners se fundamentan de alguna manera en esto.
Lo que más destaca es lo mucho que disfruta Oliver Magatón rodando el cuerpo de Saldaña. Saca provecho de cada curva, de cada eentímetro del mismo. Y aprovecho la ocasión para comentar que no sé si ese es el verdadero apellido del director, pero no podéis negar que mola…jeje.
También destaca la presencia de Michael Vartan, lo que dice mucho de la vocación de la película, además de servir de chiste culterano freak .
Es una buena película para uno de esos sábados lluviosos en lo que todo lo que te apetece es despatarrarte en el sillón y ver algo entretenido que no te exija demasiado. Que se pueda ver con el cerebro a medio gas y un bowl con ganchitos, fritos o lo que te apetezca y una cerveza.

Como acabar con tu jefe
Tengo que reconocer que esta película me ha sorprendido bastante. Y para bien. Yo esperaba que los protas fueran unos descerebrados, en la tradición de la nueva comedia americana, ya sabéis, Apatow, resacones y demás. El caso es que nos encontramos con tres buenos trabajadores que ven como única salida a su peliaguda situación el cometer asesinato. A partir de ahí, se les escapa la cosa de las manos y entramos en el campo de la comedia, donde la exageración y la bufa son las reinas.
Lo mejor de la película son sus excelentes actores y lo bien que lo hacen. Para mí, destaca una Jennifer Anniston alejada de sus papeles habituales, haciendo de una dentista acosadora sexual y algo ninfómana. Ahora que ya han pasado 10 años desde su fin, podemos decir sin temor a equivocarnos que de todos los actores de la serie “Friends , la que ha salido mejor parada es Jenny. Muy acertada en esta película. Pero no tenemos porqué quedarnos solo con ella: podemos también citar a actores de probada sovencia, como Kevin Spacey, Jason Suidekis o un muy divertido Colin Farrell.
La película tiene una buena estructura, buenos twists y una lógica, tanto interna como externa bastante sólida. Carece de caídas de ritmo o situaciones alargadas en exceso, problema que últimamente presentan bastante las comedias, y, además, no prima el lucimiento de ninguno de los actores, al estar libre de servilismos. Se le puede acusar de cierto conformismo, de no llegar hasta donde podría llegar si realmente fueran valientes. También de que el final es un poco happy de más. No es que sea un happy ending sin dudas, pero creo que el tono exigía más mala leche.
No me gustaría dejar de decir que en ningún momento se pierde el buen gusto. Los chistes son siempre bastante elegantes, a pesar de que puedan ser provocativos en su contenido. Lo que está bien, ya que creo que últimamente, se ha perdido la sutilidad en buena parte del cine. Tal vez debido al target adolescente descerebrado y anlafabestia (gracias a las acertadas políticas educativas de nuestros insignes gobiernos, cada uno que apechugue lo suyo) al que se están dirigiendo cada vez más los massmedia. Una pena
Una buena comedia para divertirse un rato y echarse unas risas con la novia, ya que es la típica película que contenta a todos los sectores de la sociedad.

Los abrazos rotos

Esta es la primera vez que comento algo sobre una película de Almodóvar, el más internacional de nuestros cineastas. No lo he hecho antes porque no se ha dado la ocasión. Pero la semana pasada he visto el Bluray de esta película, ahora ya la penúltima, del manchego y no me he podido resistir a poner mi granito de arroz en este blog.
Para empezar, estoy obligado a decir que considero a Almodóvar un gran cineasta, más allá de que sus películas me puedan gustar más o menos. Tiene algo que es muy difícil de encontrar: personalidad. Y una imagen, un estilo, característico muy reconocible, amén de unos temas que se repiten sea cual sea el género que aborde. Por otra parte, al tener su propia productora, se nota que es bastante libre a la hora de plantearse sus películas y/o estructurarlas.
Con esto no quiero decir que me guste todo lo que hace. Tiene el dudoso honor de haber sido el único director que ha logrado que me quede durmiendo mientras veo una película de él. Si me quedo dormido viendo una película es porque la estoy viendo en la televisión, es tarde y la pausa de publicidad demasiado larga. Por otra parte, es un director que saca lo mejor de todos sus actores. Penélope Cruz nunca ha estado mejor que con el manchego.
En este caso, Almodóvar nos habla desde el presente de un director de cine que se ha quedado ciego de su amour fou y de las consecuencias que este ha ido teniendo en todos los personajes que pueblan el siempre curioso y algo inquietante universo de la película. Me encanta cómo logra hacer una película la mar de entretenida, nunca aburrida, pasándose por el arco del triunfo las “reglas” del cine que se postulan en todas las escuelas de cine del mundo, heredadas de la factoría de sueños en la que se ha convertido Hollywood. Más industrial cada vez. Ya lo he comentado aquí, pero creo que hay que volver a decirlo: ¡¡¡Cuánto daño has hecho al cine, McKay!!!
Nos encontramos con una película tiene difícil adscripción a un género. Es un drama con toques de comedia y romance. Y, lo que es mejor, lo hace de un modo bastante equilibrado. Equilibra bastante las diferentes facetas de los diferentes géneros, sus constantes, para transgredirlos e ir más allá de ellos. Esto no quita que algunas escenas y situaciones se alarguen un poco en exceso (pienso en el chiste de los vampiros, por ejemplo). También me ha llamado mucho la atención que repita la misma escena, idéntica, dos veces, a pesar de su significación más allá del propio film. Y digo esto porque, además de la importancia que tiene esa escena en la película, es un auto homenaje de Almodóvar, una auto cita poco disimulada. Normalmente odio que la gente se auto cite. Lo considero grosero y engreído, una vulgaridad (Ver mis comentarios sobre Avatar). Pero en este caso tiene un extraño sentido y una curiosa función catalizadora que es muy interesante. Es una apuesta muy arriesgada que sale bien por los pelos.
Como todas las películas de Almodóvar, es un film que está siempre en el límite, si bien nunca lo trasciende. Por enésima vez, lo que creo que empieza a significar algo. Yo defiendo a Almodóvar en este país cainita, lleno de envidiosos.
Como final de este breve comentario, decir que, como extra, viene el corto de “La concejala Antropófaga”, mucho más cerca del primer Almodóvar y muy recomendable como complemento a la película.
Amor y otras drogas

Como me he dado cuenta de que he puesto las anteriores películas bastante bien, ahora voy a hablar de una que no me ha gustado nada: “Amor y otras drogas”. La he encontrado vulgar en todos los sentidos de la palabra. Es una medianía que no aporta nada, está mal hecha, su mensaje es confuso y absurdo y la trama entera carece de interés, para empezar, y de sentido solo para continuar. Y no llego a terminar.
Jamie Randall (Jake Gyllenhaal) es un jovenzuelo del que nos sugieren que es muy listo, pero que prefiere gastar su vida vendiendo electrodomésticos y acostándose con todas las que pilla por delante, pues el pobre tiene una gran zozobra interior. El caso es que se calza a la esposa de su jefe y este se entera, de forma que lo echa y tiene que buscarse un nuevo curro: visitante de Pfizer justo cuando esta saca el Viagra. Utilizando su magnética personalidad y la pastillita azul, acaba por meter un poquillo la cabeza en el mundillo y, en una visita, conoce a una chica joven algo casquivana interpretada por Anne Hathaway que está enferma de Parkinson. Comienzan a salir, pero ella es reticente a profundizar en la relación debido a malas experiencias y a su enfermedad. El resto, os lo podeis imaginar…
El argumento, el quiz de la cuestión no es malo. Pero está tan mal desarrollado… Es torpe en grado sumo. Los personajes no están bien explicados, carecen de alma, propósito, son tremendamente planos. Esto solo ya se carga cualquier película. Pero es que hay que sumar un dasarrollo de la historia desastroso, sin sentido, a trompicones y reiterativo. Además, está lleno de incongruencias, inconsistencias y situaciones forzadas y sin sentido. Como sin sentido son muchas de las reacciones de los personajes. Un horror, vamos.
Por otra parte, los guionistas (y el director) cometen el terrible error de confundir provocación con valentía, sexo con amor y desnudos con atrevimiento. Alucino con el hecho de que en pleno siglo XXI pase esto en una película. Aprovechando la oportunidad que se me brinda en bandeja, debo de decir que hay que ser muy bueno para que en pantalla un desnudo físico se vea como un desnudo del alma. Y más en un momento como el presente, tan despersonalizado, en el que se tiende a que todo el mundo sea transparente.
No me gusta nada decirlo, pero es una película a evitar. No perdáis el tiempo. En serio. Es un horror.

2 comentarios:

Ryo Saeba dijo...

Estuviera tentado hace poco a ver "Amor y otras drogas" pero gracias a tu comentario casi que voy a evitarla.

Spiderpuff dijo...

Halo! perdón por usar tu Blog, ¡oh Arcano! para contestar un comentario de Mr. Ryo(m estoy poniendo al día con las pelis, y lo suyo es q lo comente donde se hizo, no?): Sr. Saeba ¿deja de probar un postre si el venerable Arcano OPINA que no LE GUSTÓ? ains....
Continúo con mi actualización oc.2.0.11 xD
Pd. ...winter's coming!!! yujuuuuu